Promoción De La Autonomía
Uno de los objetivos principales en el cuidado de la persona dependiente es la promoción de la autonomía del individuo, ya que si conseguimos que la persona sea lo máximo de autónoma que pueda según sus posibilidades contribuimos directamente a una mejora de la calidad de su vida.
El mantenimiento de la autonomía de la persona depende de tres elementos:
- La capacidad intrínseca de la persona, es decir, las características del individuo y las propias capacidades.
- Las características del entorno, es decir, cómo está adaptado el entorno para que la persona dependiente pueda realizar las tareas de su día a día con el máximo nivel de autonomía posible.
- Las interacciones entre la persona y el entorno, que será un proceso influenciado por las características del individuo y el nivel de adaptación del entorno a éste.
Por lo tanto, la persona que realiza los cuidados dispone de varios recursos a su alrededor para fomentar la autonomía del individuo y reducir la necesidad de la ayuda de un tercero por parte de éste para realizar las actividades básicas de la vida diaria. Las líneas que se pueden seguir para potenciar esta autonomía son las siguientes:
- El uso de los productos de apoyo que facilitan que el individuo realice las actividades de la vida diaria sin la ayuda de una tercera persona.
- Realizar cambios en el hogar para adaptarlo a las características de la persona dependiente facilitando de esta manera que pueda seguir realizando las tareas diarias.
- La promoción de las capacidades del individuo a través de ejercicios concretos y diseñados exclusivamente para este fin.
En conclusión, para escoger una estrategia eficaz de promoción de la autonomía para la persona dependiente es importante conocer las necesidades concretas de esta. En este blog, encontrarás información detallada sobre los diferentes recursos mencionados con anterioridad y sobre la necesidad concreta a la que da respuesta cada uno de ellos.